Una sesión de espiritismo real tiene como objetivo conectarte, y hablar con espíritus, que se pueden comunicar a través de ruidos, zumbidos, levitación de objetos y algunos por intervención del espíritu a través de los médiums. Muchos buscan realizar estas sesiones con el fin de contactar familiares o amigos que murieron recientemente.

Un ejemplo famoso es la sesión espiritista de Harry Houdini que realizaba estas sesiones tratando de desacreditar a los médiums que decían poder contactar con el espíritu de su madre solo porque este espíritu no hablaba en el idioma natal de la madre de Harry. A lo que muchos médiums responderán diciendo que estos espíritus no conocen ningún idioma, ya que se comunican directamente al subconsciente del médium y este consigue una traducción inmediata.

Una breve historia sobre las sesiones espiritistas

El espiritismo nación alrededor de 1800 y se celebraran dentro de un circulo formado por un grupo de asistentes llamadas ‘niñeras’, gracias a este círculo creaban un campo de interminable energía que lograba atraer a los espíritus.
Las médiums mejores conocidas para el año 1848, eran las hermanas Fox, Leah, Margaret y Catherine, que llevaron estas sesiones de espiritismo a otro nivel de popularidad alrededor del mundo. Ellas se comunicaban con los espíritus a través de la tipología, lo que quiere decir que los espíritus respondían sus preguntas a través de golpes en las mesas. Y aun luego de que una de las hermanas confeso que todo lo que hacían era falso en 1888 el movimiento espiritista continuo creciendo sin grandes problemas.

Peligros en estas sesiones

Como cualquier tipo de intento de comunicación con el mundo de los espíritus, puede ser interesante y especial, también puede traer con él ciertos peligros que esta práctica puede llevar.
Estas sesiones abre una puerta, que pertenecerá abierta para los espíritus, la realización de estas sesiones no es exactamente lo que presenta peligro, es el hecho de que si no se realiza bien uno puede invitar a ciertas entidades no humanas a su vida, y estas entidades usualmente no tienen otro objetivo además de causar daño en tu vida.

Antes de la sesión

Si de verdad quieres realizar esta sesión debes tener claro ciertas cosas como, que es los que esperas conseguir de esto, con quien quieres comunicarte específicamente, donde la vas a realizar, quien participara contigo, debes escoger a alguien que se lo tomara en serio y no será irrespetuoso y no interrumpirá la sesión y finalmente si vas a grabar la sesión.

Realizar la sesión

Una vez que ya hayas decidido el lugar y con quien decides hacerlo, debes pedirle a los que te acompañen que apaguen sus celulares. Algunos prefieren decir una oración para protegerse durante la sesión.
Primero debes pedirle permiso a los espíritus para poder comunicarte con ellos, y organiza a los participantes en un círculo y tómense de las manos. Haz preguntas simples como “¿Hay alguien presente con nosotros?” y asegúrate de que los presentes no se muevan ni hagan ningún ruido para estar seguros de que si hay alguna respuesta sea real no alguno de los participantes.
Cuando termines de hacer tus preguntas asegúrate de dar las gracias a los espíritus y serás libre para irte.